Para contar o explicar algo siempre me ha gustado escribirlo, no porque tenga dotes literarias sino porque, como lo escrito escrito queda, no pueden decirme eso de "pues tu dijiste ...". Además me gusta escribir aunque sea una cosa que a nadie le interese para ejercitar el "cacúmen" y ahuyentar al señor alemán ese que se llama Alzheimer.
Paralelamente existen personas con pocas "entendederas" y que llegan a unas conclusiones realmente sorprendentes. No se me olvida una anécdota ocurrida allá por los años cincuenta.
Habían estrenado en mi pueblo la película QUO VADIS basada en la novela de Henrik Sienkiewicz (Premio Nobel de literatura de 1905). Aunque en la película había bastantes, digamos "adaptaciones cinematográficas" que no tenían nada que ver con la novela, era indudablemente distinta a lo que veníamos viendo en aquella época y fue quizá la primera de las "superproduciones " del cine americano. Tuve la suerte de verla y me entusiasmó, creo que la llevo viendo al menos diez veces.
Supongo que la habréis visto y sabréis que el protagonista (Marco Vinicio) era interpretado por Róbert Taylor . Pues bien, al día siguiente, un chico que la había visto estaba contándosela a un amigo y cuando pasé a su lado estaba diciéndo : " Entonces va Kovadis y dice..., vamos que lo del título no lo había entendido muy bien.
Desde que conté a mis hijos esta anécdota, a Robert Taylor lo llamamos Kovadis. Muchas películas entre otras Ivanhoe o El Gran secreto que contaba la historia del Proyecto Manhatan y la bomba de Hiroshima fueron interpretadas por "Kovadis" :)
A lo que iba (las entendederas), hay que tener mucho cuidado con lo que se dice queriendo dar doctrina, pues existe el riesgo de que unidas a nuestras "explicaderas" acabemos propagando alguna herejía de las antiguas.
Por ello es conveniente encomendarse al Espíritu Santo antes de hablar o de escribir para que nos dé el Don de Lenguas...
QDOB
No pienses ni creas que te voy a decir algo que no piense, porque sería engañarme, yo primero y luego a ti. Nada me obliga a descubrir lo que pienso.
ResponderEliminarEn mi opinión creo que tu blog está muy bien. Tu forma de expresarte me parece buena y tus reflexiones o historias llevan una moraleja que ayudan a reflexionar y a mejorar.
Sabes que nadie es profeta en su tierra, y menos en su casa. Por lo tanto, nunca te desvalores por lo que te digan en tu familia.
Y no te lo digo por cumplir, sino por propia experiencia. En mi propia casa nadie lee mis post y mis opiniones no son tomadas con mucho interés. El libro que publiqué, por la acción del Espíritu, creo que ni lo han leído, así que puedes figurarte.
¡Qué cuando no esté en este mundo me vean de otra forma? Entonces ya no importa.
No te preocupes por nada. Sigue adelante y trata de ser tu mismo, de acuerdo con la voluntad del Padre Dios. Es lo único que importa. Él es nuestro verdadero e importante público.
Un fuerte abrazo en Xto.Jesús.
Gracias Salvador
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